
El principal escollo que deberá superar Alemania será la ausencia de Michael Ballack, figura y capitán del equipo, quien no estará en el Mundial por lesión. El técnico Joachim Löw apostará a sus delanteros Podolski y Klose para quebrar la resistencia australiana.
Todavía falta ver si los jóvenes alemanes muestran su calidad individual y pueden cargar el peso de la historia futbolística de su país. El manager del equipo, Oliver Bierhoff, destacó que todo deberá ser confirmado en la cancha, algo que no parece tan fácil. "Llegó el momento de la verdad. Tenemos que mostrar lo que podemos rendir. El partido de estreno es una tarea dura para nuestra joven selección", subrayó.
Australia llega con poco ruedo mundialista, y debutará frente al rival más complicado del grupo D, que comparte con Serbia y Ghana.